Formación de profesoras

Tengo pendientes tantas "entradas" que si ahora mismo me pinchan no sé hacia donde sangrar...

Así que empecemos por el principio: el sábado 1 de noviembre, en plena resaca halloweenera, cogi la bolsa y me presenté en la lluviosa Barcelona para hacer el módulo uno del primer nivel de formación de profesoras que organizan Ayda y Zuel. Tenía muchas ganas de meterme en esa aventura y aclarar conceptos, porque aunque ya llevo tiempo enseñando me muevo mucho más por intuición que por otra cosa, dejándome llevar por lo que me gustaría a mi recibir en una clase.

Zuel y Ayda lo tienen todo muy organizado y pautado, lo que no significa que no tengamos tiempo para comentar lo que sea; durante el fin de semana estuvimos tratando sobre estiramientos, historia, ritmos y cómo bailarlos, cómo bailar un baladi, khaligi...

Para mi cubrió todas las espectativas, me sentí reconfortada porque todo me sonaba, porque no había nada que fuera ajeno, porque mi intuición me ha llevado por el buen camino...

Pero que nadie se engañe, tanto éste curso cómo el curso de formación de profesoras de Munique Neith (que tengo empezado y espero poder terminar si mi rodilla me lo permite), no te enseñan a ser profesora si tú no tienes una base de danza oriental. Se necesita esa base para después poder ponerlo todo en orden, para que los profesores que dan el curso puedan pautar lo que debería ser una clase de danza. No tiene sentido alguno ir como una hoja en blanco y esperar que Ayda, Zuel o quien sea te rellene con un montón de conocimientos en un fin de semana. Ellos ofrecen su experiencia y conocimientos para que tú puedas aplicarlo, pero la base SE HA DE TENER porque si no se pierden todos los matices que nos puedan enseñar.

Mientras ellos iban desgranando conocimientos yo, por dentro, iba agradeciendo todos los talleres que he ido haciendo durante estos años de aprendizaje: estiramientos del método Sarabi con Najat y Cristina Manrique; ritmos con Lena y, sobretodo, con Munique Neith (gracias a la cual ya no miro los ritmos como a unos enemigos); khaligi con Paula Lena; ghawazee con Zuel; historia y bailarinas gracias a internet...

Siempre he pensado que era un poco fricky por buscar y buscar información como una desesperada, pero todo eso, a falta de una buena "universidad" es lo mínimo que podemos hacer... no hace falta saberse de memoría nombres, ni de bailarinas ni de ritmos, pero sí es importante reconocerlos a ambos. Y mucho más si queremos dar clases. Es una cuestión de respeto: no se te ocurriría dar clases de mates sin antes haberlas estudiado y mucho menos si nunca has estudiado mates!

Evidentemente me he quedado con ganas de más y espero que la economía me lo permita, porque tanto Ayda como Zuel han organizado el curso de tal manera que lo único que te apetece es tener más y más!

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